domingo, 29 de abril de 2007

¿Yo, matando la musica?



Antiguamente la música era una expresión artística como el teatro, la poesía, etc. Era parte de la cultura de un pueblo, del folclore (palabra inglesa que significa “saber popular”, y antes se refería a la transmisión oral a través de leyendas, canciones y poesías del conocimiento de la gente).
Lo que antes era un fenómeno en directo, regional y gratuito, fue visto por las garras comerciales como un buen negocio., Comenzando la comercialización de esta expresión artística.

La industria discográfica nace con la fundación de Columbia Records en 1910, sello que grabo y movió la música de aquella época.
A partir de ahí surgieron más sellos; ahora gigantescas empresas como Sony music (japonesa), EMI (británica), BMG (de la corporación Bertelsmann alemana), Poligram (de la Phillips Electronics holandesa) o Warner (de Time Warner incorporated, con base en EE.UU.) muchas de las cuales tienen contacto directo con la industria bélica, aportando tecnología para radares, misiles etc.

Algunos de estos monstruos multinacionales tienen ingresos anuales superiores a los 30 billones de dólares (más de la producción nacional de varios países juntos)

Cuando un grupo o solista, firma con uno de estos sellos se le ponen condiciones como:

-Los temas grabados son propiedad del sello.
-Si la banda abandona el sello, debe indemnizar a este.
-Si a la banda la quiere fichar la competencia, el sello tiene derecho a recompra antes que este.
La consecuencia de esto es que las canciones pasan a ser “propiedad” de una empresa a la que poco o nada le interesa la música, sino el dinero que esta genera.


¿Recuerda cuanto le costo el ultimo CD original que se compro? ¿6000? ¿10.000? ¿12.000?

¿Sabia que al comprar un disco de un grupo de moda, además esta pagando por lo que nadie quiere oír?

¿Sabia que bastan uno o dos grupos súper ventas para mantener grupos que nadie quiere comprar?

¿Sabia que al comprar un disco de estos sellos, aproximadamente el 90% de lo que pagó no va para la banda sino para el sello, promoción, tiendas, etc.?

Los(as) músicos generalmente no viven de lo que los discos venden, sino que de sus conciertos y presentaciones en vivo. Y si son ellos(as) quienes ponen su creatividad trabajo y talento en una canción ¿Por qué darle dinero a un sello?



En la actualidad los gigantes de la industria discográfica en Chile se han visto en apuros por el tema de la piratería, lo que ha reducido bastante sus ventas., A raíz de esto nace la campaña publicitaria “no mates la música” poniendo a los consumidores como culpables ante una supuesta “muerte de la música”, cuando comprar piratería es la lógica consecuencia de un país con una economía inestable y precios elevadísimos e injustificados, como los que cobran las desquerías y las tiendas convencionales.

¿Sabia UD. Que existen circuitos de música alternativa donde es posible adquirir CDs originales…

-Con la misma calidad de sonido que Britney Spears (por poner un ejemplo)
-misma o mejor calidad de edición de su carátula (a color, letras, etc.)
-con la misma duración.
…En menos de 3000 pesos...

Estamos hablando de discos de bandas concientes, que les interesa la música, y que todos y todas podamos oírla y disfrutarla.

Consumidor, consumidora aunque usted no compre discos originales las música no morirá, puesto que es una expresión artística, espontánea que ha existido y existirá por siempre.
Que no lo engañen, ante los precios abusivos ¡¡¡copie baje y difunda¡¡¡

¡¡ Y QUE VIVA LA MUSICA ¡¡

jueves, 19 de abril de 2007

PINTAREMOS HASTA EL CIELO...

Graffiti Soul

No están bien las cosas para los graffiteros nacionales, no estamos hablando ni de un sindicato ni de un colectivo, son personas dispersas en grupitos a lo sumo, y aunque ahora estén de moda los ahora llamado graffitis han existidos durante toda la historia de la humanidad y casi siempre han sido una actividad difusa y anónima.
Para reconstruir la prehistoria las únicas imágenes con que cuentan los eruditos son los rayados, marcas y figuras de las cavernas, toscas pero que hasta nuestros días nos logran transportar a esos tiempos.
Otros aficionados a los graffitis eran los romanos ellos escribían en los muros de las casas poemas, insultos, obscenidades, dibujos etc. Muchos de estos rallados (unos 10.000) son conservados hasta nuestros días en las ruinas de Pompeya, también en las oscuras mazmorras de la edad media se grabaron infinitas inscripciones dejando allí una huella de la añorada libertad.

Recién en los años 30 arqueólogos Peruanos y Americanos descubrieron que los trazados de 1 a 2 metros por hasta 20 de largo mirados desde el cielo representaban hermosos dibujos de pájaros, aves, planetas etc. Estos dibujos hasta nuestros días nos siguen asombrando y despertando fabulosas teorías.
También en Perú hace poco unos desdichados manchones azules con forma de serpientes hechos en una histórica piedra Inca, tubo a sus autores (dos estudiantes chilenos) cargando con toda una historia de agravios desencuentros entre Chilenos y Peruanos.
Entre tanto en Chile el diputado Jorge Burgos presenta un proyecto de ley para castigar con severidad a los graffiteros que quieren demasiado a sus sprays y que despliegan en nuestra ciudad una actividad no siempre bienvenida, habrá duras multas y en caso de reincidencia cárcel y trabajos forzados, para ser, como dicen unas maquilladas señoras, útiles a la sociedad.

Ya desde el año 68 teóricos del arte, estudiosos de la ciudad contemporánea, sociólogos y antropólogos coinciden en valorar el graffiti como una potente expresión de la vida urbana y social.
La moderna metrópolis es mas que un aséptico livin de barrio alto, es un territorio de encuentro, una suma de culturas donde cada cual debe encontrar su espacio. Una ciudad blanqueada por la autoridad seguramente luciría mas pulida, pero también menos viva, como paso cuando Pinochet tomo el poder en 1973 y uno de los primeros bandos que dispuso fue el blanqueamiento de los muros, como forma de neutralizar la vida ciudadana pero, ¿cómo se equilibra el derecho de los propietarios de casas y el difuso derecho de quienes quieren expresarse echando una rayita al aire?


Ese equilibrio debería darse naturalmente gracias a una política preocupada tanto de las personas comunes y corrientes como de los grandes conglomerados económicos, pero en la realidad solo las grandes empresas y grupos de poder tienen el derecho a desplegar sus imágenes y letras tapando arquitectura y parques, ensuciando y no mostrando el más mínimo respeto por el espacio en que miles de personas vivimos.
A ellos nadie los cuestiona ni encarcela siendo que nos agreden de forma más certera y engañosa con su imperceptible sugestión y subliminalidad, enfocada solo a vender o mantenernos controlados.

No se humaniza la ciudad al ver desde una micro un “negra te amo” rayado en un muro, no nos sorprende el signo de una tribu urbana o el homenaje a un amigo rayado a todo color en un muro olvidado.
Vivimos en un momento cultural híbrido, las diversas estéticas y estilos se mezclan y se superponen, por eso debemos tener cuidado con las purezas extremas las que vienen del poder que solo se identifica con una cara de la moneda que siempre es la de los poderosos, el derecho a la libertad es para todos tanto para el graffitero como para el propietario. Articular esos derechos a fin de que cada uno tenga lo suyo es nuestro desafío como ciudadanos…y mientras tanto seguiremos pintando hasta el cielo…..





Mientras la publicidad sin siquiera preguntarnos invade todos nuestros espacios de manera violenta, con el único fin de aumentar sus ventas crear falsas necesidades y aumentar nuestros miedos, el graffiti se transforma en la manera democrática de plasmar el arte en la calle, pero mientras a muchos les molesta el graffiti dejan que la publicidad se apodere de todo sin siquiera darse cuenta.


Mario Elias...

martes, 27 de febrero de 2007

Mis Mascotas

"...deseaba tener un perro, porque recordaba que cuando era pequeño tenia uno, que era mi amigo cuando nadie mas queria serlo..."
( Harlan Ellison, "El pajaro de la Muerte" )
*
Me considero animal por eso no dudo que lo que siento por mis mascotas es puro y simple amor, las amo mas de lo que amo a muchas personas y valoro sus vidas mucho mas. Me indigno ante leyes que otorgan más derechos a violadores, asesinos y traficantes que a los animales, al mirarlos veo la fuerza de la naturaleza y el instinto,viéndolos me doy cuenta de que los humanos con nuestro “desarrollo intelectual” nos consideramos superiores siendo que raras veces lo somos y la mayoría de las veces somos peores.
Cuando en mi vida han fallado amigos familia pareja cuando e fallado yo los animales han sido los únicos que incondicionalmente me han dando su cariño. Todo mi respeto para ellos.

Mario Elías.